"La Historia que cuenta mi Pueblo"


"LOS RELATOS DE LA HISTORIA QUE CUENTA MI PUEBLO”, por José Sáez Calvo

...Ordenados y así de este modo tendremos toda nuestra historia a nuestra mano para poder leerla cuando nos apetezca y al mismo tiempo ser UN SERVICIO DE INFORMACIÓN PARA PERSONAS Y COLEGIOS QUE QUIERAN HACER USO DE ESTA INFORMACIÓN RELACIONADA CON LA HISTORIA DE LA REAL VILLA DE SAN FELIPE NERI"

ÍNDICE 5. Cesión de terrenos a Belluga. Primera cesión de Orihuela  4. San Felipe Neri el viejo  3. Colonización en el siglo XVIII;  2. Las Escrituras de Fundaciones; 1. Toponimia

Construcciones de Fundaciones en la Plaza Cardenal Belluga
 5. Cesión de terrenos a Belluga. Primera cesión de Orihuela  Belluga sabe que la ciudad de Orihuela está dispuesta a Donar unos terrenos de su jurisdicción incultos y lagunosos,  imposibles de cultivar si no se desaguaban, lo que no había podido conseguirse por ser costosísimo, debido al defecto de caída de las aguas. Belluga aparca entonces sus intenciones respecto a las casas de menores, de recogidas y oratorio de San Felipe Neri, pues sabe que:   [...] lo que ninguna de sus compras pudiera hacer, podía lograr con la colonización[1],  empezando a cultivar aquellas primeras tierras de la amplia huerta de Orihuela. En 1704  dispone 4.500 tahúllas en enfiteusis, teniendo la obligación los labradores de poner en cultivo sus tierras en el plazo máximo de cuatro años, y el incumplimiento de tal condición suponga el dominio de la ciudad sobre las mismas.

[1] LATOUR BROTONS, J.: Ob. Cit.

...La fábrica constructiva es de mampostería, enfoscada con mortero de cal a los exteriores, muy degradados en la actualidad, teja árabe en la nave principal y teja alicantina –más moderna y posiblemente sustitutoria de la anterior- en las naves laterales y añadidos en la zona posterior del presbiterio.La piedra de mampostería colocada y ajustada sin orden de hiladas o tamaños, acarreada por carros y jumentos de diversos lugares, como cantos rodados, restos de canteras, pizarras, basaltos o piedras calizas.
4. San Felipe el viejo, primer asentamiento de Fundaciones    La realización de los primeros trabajos encaminados a la desecación, limpieza de malezas, apertura de azarbes y la propia construcción de los pueblos, supone necesariamente el establecimiento de un núcleo provisional que permita el alojamiento de los trabajadores, el almacenamiento de materiales, instrumentos, útiles y aperos de labor, así como el cobijo de las bestias que han de trabajar junto al hombre en la imponente tarea encomendada por la egregia figura de Belluga, que no se olvidó, lógicamente, de que hubiese una atención espiritual a los colonos[1].
Este lugar se enclava al N de la zona pantanosa, justo en el cruce de la Vereda de Sendres y el Camino Viejo de Catral (antiguo camino de herradura o camino de Elche), Donde hasta hace unos años persistían ruinas del asentamiento conocido con el nombre de "San Phelipe el viejo[2]". A finales de los años cincuenta, esas tierras, propiedad de un letrado almoradidense, fueron trabajadas para ponerla en cultivo.

[1]  Hemos visto una pila de acristianar procedente del Lugarico,  desaparecida hoy.
[2] CAVANILLES muestra en su mapa de la red de riegos y avenamiento en la Huerta de Orihuela, la ubicación de San Felipe el viejo, 1795.

Paisaje único donde la vegetación de palmeras destaca, un carro típico abandonado, casa del antiguo Viveros del Segura, en Las Casicas
3. Colonización en el siglo XVIII  Los últimos años del XVII y los primeros decenios del XVIII representan el bache más profundo de la progresión de la vida social y del adelantamiento intelectual españoles[1],  hasta avanzado el de Felipe V y es cuando se produce la fundación de San Felipe Neri y empiezan a establecerse los primeros colonos; son los momentos de la gestación de la España contemporánea.
La política de colonización de la península, que comenzó en la edad moderna, tuvo en el XVIII el apoyo del pueblo y de los gobernantes, creándose nuevos pueblos y zonas agrícolas hasta entonces improductivas o abandonadas.
La más importante fundación de carácter privado fue la de Belluga[2], la primera villa de Fundaciones, San Felipe Neri.

[1] COSTA MÁS, J.: Colectivismo agrario en España.
[2] COSSÍO, J.M.: Introducción a la lectura del Padre Feijóo. Revista del Escorial, nº 4, p 199.

Cementerio Parroqial, pinos de los años 50 y antiguo Camino de Herradura
2. Las Escrituras de Fundaciones  El Cardenal Belluga ordenó varias pías Fundaciones para la Diócesis de Cartagena, en Escritura que otorgó en Murcia en 1715. Catorce años después dispone en Roma la Escritura de 8 diciembre 1729, confirmada por  Benedicto XIII de 14  diciembre del mismo año y aprobada por Felipe V en Sevilla el 17 abril 1732, aceptando el Patronato de todas las Fundaciones. Y nombra Juez Conservador Privativo y Protector al Ilmo. Señor don Francisco de Arriaza.
           La Escritura de 1729 reduce cinco anteriores y relaciona todas las pías Fundaciones. La Escritura de 1741, que es la que nos interesa, fue redactada por Belluga, a los 69 años, “para perpetuar las Fundaciones y cumplieran sus fines".
Deja claro que quiere una mejor y más eficaz administración, pues: [...] ésta es la única Escritura que hay que observar. Así, se cesan mozos y ministros que se están manteniendo a costa de  Fundaciones, y ordena que se vendan mulas, bueyes, carretas y pertrechos comprados a expensas de la Obra[1]. Belluga tiene 79 años y viendo su muerte cercana, suprime muchos gastos, ya que cesarían las ayudas de las rentas de la mitra de Cartagena cuando falleciese. Al renunciar al obispado, Benedicto XIII, a petición de Felipe V, dispone que las rentas del obispado se apliquen a  las p. Fundaciones.
Benedicto XIV la confirma en 1741[2],  ordenando que no se donen ni presten los caudales ni los frutos pertenecientes a las  Fundaciones,  encargando al Obispo de Cartagena su observancia y ejecución.

1 AMM: Escritura de 1741...  p 67.
[2]  Reimpreso en Murcia por Nicolás Villagordo Alcaraz. Murcia, 1753.
Iglesia y pueblo desde la actual carretera de Matola
1. Toponimia. Por negligencia, otras veces por ignorancia o dejadez, se hace uso inadecuado del topónimo SAN FELIPE NERI (Gentilicio: sanfelinense) cuando se añade la partícula "de". La utilización "de NERI" es considerada por el autor como un verdadero complemento de "lejanía" que es preciso desechar.
         Desde su fundación por el Cardenal Belluga, esta villa lució el nombre SAN FELIPE NERI, nunca con el complemento, que con el tiempo se hizo algunas veces habitual en vallas, folletos e incluso señalizaciones y mapas. Es preciso volver a sus verdaderos orígenes y entender que Belluga dio el nombre a esta villa tomándolo del santo italiano[1], corrección que encontramos en cualquier diccionario, incluido en de la Real Academia de la Lengua. Historiadores como Cavanilles, Montesinos, Madoz y otros, utilizan limpiamente el TOPÓNIMO tanto en el s. XVIII como en el transcurso del XIX y el XX. Hagamos honor a la verdad gramatical poniendo en práctica un uso racional y correcto,  que es el de "San Felipe Neri", y desechemos acepciones que nunca tuvieron fundamento ni en sus orígenes, ni en su significación toponímica, excepto en transcriptores incultos que en toda época se dan.
         SANFILIPENSE. La etimología latina del nombre PHILIPPUS nos lleva a decir "felipense o filipense", y de ahí que el gentilicio de los nacidos en San Felipe Neri sea "sanfelipenses".

[1]  Nunca en ninguna de sus escrituras o menciones el Cardenal  utiliza incorrectamente el nombre de la Villa  San Felipe Neri.